Volver a vos
Reconectar con tu historia materna.
Crear una rutina flexible que te sostenga.
Empezar a priorizarte sin culpa.
CADA ENCUENTRO, UN PASO HACIA
TU BIENESTAR
Te comparto en detalle el recorrido que vamos a transitar juntas en
cada encuentro. Un paso a la vez, con amor y con intención:
Vuelvo a mí
Redescubro quién soy desde que soy mamá. Me reconecto con mi historia y mi identidad personal, identifico cuándo empecé a postergarme y empiezo a construir pequeñas acciones de autocuidado que me devuelvan energía y claridad. Le vuelvo a dar lugar a lo que deseo y necesito.
Me elijo sin culpas
Reconozco las exigencias y los mandatos que me atraviesan. Empiezo a desarmar la culpa para poder priorizarme sin sentir que estoy fallando. Diseño una rutina de autocuidado flexible, real y posible, que contemple mi descanso, mi salud, mis espacios y mi bienestar.
Estoy presente
Aprendo a estar verdaderamente presente para mis hijos, desde la conexión y no desde el deber. Incorporo herramientas simples de regulación emocional, respiración y mindfulness para acompañar la crianza con más calma, empatía y disfrute.
Crío con amor y límites
Exploro cómo poner límites sin culpas y desde la empatía. Aprendo a sostener rutinas familiares que cuiden el vínculo y la organización cotidiana, sin caer en rigideces. Trabajo mi comunicación, pido ayuda y me animo a crear un entorno más equilibrado para todos.
Sostengo lo que me hace bien
Me comprometo conmigo misma. Paso de la intención a la acción, con una práctica guiada de 21 días para implementar y sostener las rutinas amorosas que diseñé. Trabajo sobre la constancia, la disciplina amable y cómo acompañarme en los días más difíciles.
Me celebro
Hacemos un cierre amoroso y poderoso. Reconozco todo lo que transformé, celebro lo que logré, y me llevo herramientas para seguir sosteniéndome. Me comprometo a seguir eligiéndome, con más confianza, amor propio y plenitud en mi rol de mamá y como mujer.
